Compañeras y compañeros:
Soy Alberto Pérez Vázquez, vecino de La Cala del Moral, tengo 37 años y soy padre de familia numerosa actualmente en paro. Mi vida laboral siempre estuvo a caballo entre la hostelería y el sector servicios, he residido en Estepona, Mallorca, Málaga y desde septiembre de 2006, en mi domicilio actual.
Mi infancia no se podría entender sin la política, soy hijo de un histórico dirigente de UGT de Estepona y por ello son muchísimas las vivencias junto a mi padre; nunca podré olvidar aquellas gigantescas manifestaciones del Primero de Mayo en Málaga en la década de los 80, o la lucha férrea del sindicato contra las políticas económicas derechistas de los gobiernos del PSOE o la traumática ruptura entre el PSOE y la UGT. Yo era el más pequeño de los 4 hijos de mi padre, y pasé mi infancia de su mano siendo su sombra en su despacho del sindicato, en los largos viajes en autobuses o en los distintos mítines políticos.
Aquellas experiencias y aquella educación germinaron en un interés permanente por la política, por el compromiso político y por unos valores y principios muy bien definidos.
De aquellos sindicalistas de viejo cuño aprendí el valor de la austeridad, del compromiso y de la lucha por la defensa de la clase trabajadora, que en mi devenir vitar se unieron al gusto y el interés por la historia, especialmente la historia reciente del movimiento obrero español y del movimiento obrero internacional con sus distintas vías políticas y económicas, entre las cuales siempre me identifiqué con aquellas que defendían la Justicia Social y el Socialismo. Socialismo de profunda raíz anticapitalista y emancipador. Socialismo en mi opinión, con sus matices y diversidades siempre defendió y defiende nuestra organización.
De esta convicción nace mi militancia en el PCE e Izquierda Unida.
Creo profundamente que esta estafa llamada crisis no se terminará hasta que los que la sufren se organicen, se unan y luchen unidos para cambiar la actual correlación de fuerzas y construir otra sociedad necesaria y perfectamente posible. Una sociedad de empleo, oportunidades, libertad y justicia social. Una nueva realidad que no existe en nuestro municipio y que también es posible construir, con otra forma de hacer política, con otra forma de ejercer la representación pública alejada de la arrogancia y el saqueo económico que en las últimas décadas han impuesto en nuestro pueblo los distintos gobierno del bipartidismo.
La única alternativa real de gobierno en Rincón de la Victoria es Izquierda Unida, una fuerza política formada por mujeres y hombres que son la misma gente que sufre en la calle las decisiones de esos poderosos que tienen como capataces a sus secuaces del bipartidismo.
Pero para convertir esa alternativa en hechos, para echarlos a ellos y poner un gobierno decente en IU, es necesario trabajar mucho, de forma cohesionada e incansable, y para ello presento mi candidatura del 2 al 11, para aportar mi grano de arena, para cumplir con la obligación más sagrada de un ciudadano comprometido, arrimar el hombro.
Allá donde me pongan mis compañeras y compañeros con su voto seré uno más empujando este proyecto de izquierdas alternativas que hoy, más que nunca, es imprescindible para nuestro pueblo.
Sí se puede!