En la jornada de ayer acompañamos a la Asociación Sociocultural y Club Senderista la Desbandá a su paso por Rincón de la Victoria.
Un año más, coincidiendo con el aniversario del crimen ejecutado en 1937 por las tropas fascistas (La Desbandá), esta asociación que lucha por la memoria, la justicia y la reparación de las víctimas y sus familias, hicieron parada en los puntos de memoria democrática con los que contamos en nuestro municipio.
Uno de estos puntos más visibles es uno de los impactos de los obuses lanzados desde la costa hacia la carretera y que podemos encontrar en la entrada de los túneles del paseo marítimo, en La Cala del Moral.
En 2016, estando en el gobierno municipal, instalamos una placa que indica dicho punto y rinde homenaje a todas las víctimas, en especial las que perdieron la vida en su huida hacia Almería.
En este punto de la etapa, desde IU Rincón realizamos una ofrenda floral y un homenaje donde nuestra coordinadora local, Rocío Calderon, leyó uno de los relatos de su nuevo libro cuyo contenido narra la vivencia de una superviviente de esta masacre.
En el aspecto municipal, desde la Asociación se instó al Ayuntamiento a que ceda un espacio donde poder pernoctar, ya que nunca se le ha cedido dicho espacio, teniendo que trasladarse a Torre del Mar; Rincón de la Victoria ha sido final de la primera etapa en diversas ocasiones, encontrándose siempre con dicha negativa.
Por nuestra parte, tanto en palabras de Rosa Ramada (Podemos) como de Rocío Calderón, cuentan con el compromiso del Grupo Municipal Con Rincón de la Victoria para trasladar dicha petición y trabajar para que el Alcalde decida convocar la Mesa de Memoria Histórica con la que cuenta nuestro municipio. Esta mesa jamás ha sido convocada por Salado, que desde 2017 gobierna el municipio y en múltiples ocasiones ha dejado clara su oposición a dicha convocatoria.
Tenemos por delante mucho trabajo institucional para aplicar la Ley de Memoria Democrática en nuestra ciudad, desde nombre de calles de «ilustres» franquistas, placas con símbolos franquistas, reconocer a todas las víctimas de la Guerra Civil que son anónimas para la historia escrita por los vencedores y que son conocidas entre la ciudadanía; en definitiva, rendir homenaje, evitar el olvido y reparar el daño de esas familias que aún esperan justicia o identificar el cuerpo de su familiar que se encuentra en una fosa común sin nombre.
